EPAZOYUCAN, Hgo.- (Enero 8, 2008) Aprovechando el asueto de fin de año, manos anónimas saquearon el retablo principal del templo católico de esta cabecera municipal.
A decir del párroco Erasmo Hernández Dorantes, quien ha estado al frente del santuario durante los últimos 12 años, explicó que el domingo 30 de diciembre, habitantes de esta comunidad se percataron de la desaparición de seis imágenes pertenecientes al retablo principal bañado en oro.
Sin embargo, aunque el clérigo acudió a hacer formal denuncia ante la agencia del Ministerio Publico, el representante social ha demorado en hacer la inspección del lugar y comenzar las pesquisas.
Hernández Dorantes informó que este es el tercer robo del que es víctima la capilla.
“Hace casi 10 años fue el primer robo, se llevaron el equipo de sonido que habían comprado los feligreses y el cáliz que era de oro puro”, reveló.
Un segundo hurto ocurrió dos años después cuando fueron plagiadas dos de las piezas del retablo. “Se llevaron a Santa Mónica y a San Charbel”.
Las iconografías sustraídas datan presumiblemente del Siglo XVII, y se integraron al catálogo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el año 2000.
Cada una de las seis piezas pesa aproximadamente 80 kilos.
Según el cura y los encargados de la iglesia, quien o quienes sustrajeron las piezas lo hicieron entrando por la parte trasera del templo, cobijados con el manto nocturno.
Se encontró la cadena que atrancaba la puerta de madera que da a la calle rota y los candados que aseguraban las puertas del altar también desaparecieron.
A propósito del hurto, el Ayuntamiento citó a los medios de comunicación a una conferencia de prensa, sólo que no asistió ningún representante gubernamental ni del INAH.
El presbítero aseguró que tanto él como la población tomarán la justicia por su cuenta y llegarán hasta las últimas consecuencias para dar con el paradero de los delincuentes.
“Es un oprobio a nuestra santa iglesia. Es una falta de respeto a nuestra fe, y no lo vamos a tolerar”, advirtió el cura.
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