Por tercera vez, denuncian extorsión en Reglamentos de Tepeapulco

TEPEAPULCO, Hgo.- (Diciembre 15, 2007) Luego que por tercera ocasión en este año, el jefe de Reglamentos y Espectáculos de la municipalidad, José Augusto Jasso Aboytes, ha sido señalado por actos de corrupción, en entrevista el funcionario rechazó las versiones emitidas por los vinateros de Ciudad Sahagún, quienes se quejan constantemente de ser víctimas de extorsión por la dependencia.

Durante una reunión efectuada por el gremio de comerciantes a mediados de la semana, decenas de vinateros acusaron a Jasso Aboytes de cobrarles una cuota mensual a cambio de permitirles violar los horarios de funcionamiento establecidos por el Ayuntamiento.

Para tener abiertos sus negocios fuera de los horarios oficiales, los vinateros tienen que pagar 300 pesos mensuales, o de lo contrario son amagados por el jefe de Reglamentos y sus inspectores con ser clausurados los expendios bajo cualquier pretexto.

Los afectados narraron que hace dos meses, Jasso Aboytes tuvo un acercamiento con el gremio de vinateros para ofrecerles una vía de solución ante las medidas estrictas adoptadas por Ayuntamiento, en las que se acordó prohibir a los establecimientos la venta de bebidas embriagantes más de siete horas diarias.

Invariablemente, los horarios oficiales sólo permiten que los vinateros abran sus negocios de 16 a 23 horas cualquier día de la semana. En un principio, desde junio de este año, Jasso Aboytes no hizo sino aplicar los horarios aprobados por el cabildo.

Pero ante el desplome de las ventas, Jasso Aboytes les mostró un planteamiento “más práctico”: les pidió a cada uno de ellos la cantidad de 300 pesos al mes “para hacerse de la vista gorda”.

Los vinateros aceptaron la propuesta, pero en el transcurso de esta semana, desde que Jasso comenzó a incrementarles la “mordida”, es que los comerciantes decidieron ventilar sus quejas.

No obstante, Jasso Aboytes negó que las acusaciones. Dijo que tanto él como su personal jamás han entrado en tratos con los vinateros.

Pero mientras el funcionario asegura que los horarios de funcionamiento para vinaterías y centros nocturnos se aplican con normalidad, es evidente que en la zona de Ciudad Sahagún es posible adquirir bebidas embriagantes a cualquier hora del día y de la noche.

Antecedentes de corrupción
En septiembre de este año, el diario unomásuno-Hidalgo dio cuenta de cómo Jerónimo Rodríguez Ávila, dedicado a la elaboración de churros y frituras, quien se hallaba ubicado en la avenida Allende, fue víctima de extorsión por el jefe de Reglamentos. Jasso Aboytes le cobra 500 pesos cada quince días, mientras su hermana, con un puesto similar en la Plaza Rodrigo Gómez, paga 700 pesos al año.

Anterior a ese caso, en febrero, el inspector Antonio González Alameda fue señalado de extorsionar, bajo los influjos del alcohol, a Alfonso Islas Moreno, propietario de la tienda de Abarrotes, Vinos y Licores “El Oasis”, ubicada frente a las instalaciones sindicales de la ex DINA.

El inspector de Reglamentos, acompañado de cuatro personas, se presentó en el expendio y exigió dos botellas de tequila a cambio de evitar la clausura del establecimiento, lo cual, ante la negativa del comerciante, derivó en el cierre del establecimiento dos semanas después.

En los estos dos casos, el alcalde Odilón Sánchez Silva instruyó a la Contraloría Municipal investigar al jefe de Reglamentos y su personal, pero “las acusaciones fueron improcedentes”, declaró en su momento Aida Núñez García, titular de la dependencia.

A fin de deslindar responsabilidades, con la nueva imputación hecha por los vinateros, se abrió la tercera investigación consecutiva contra la oficina de Reglamentos de Tepeapulco.