APAN, Hgo.- (Noviembre 18, 2007) La Visitaduría Regional de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) en Apan, hizo un enroque en su eje directivo.
Jorge Luis López del Castillo Aguirre, de Apan, fue enviado a la región de Tula de Allende, y Raúl Baños Lara, de la ciudad de los Atlantes, fue traído a la región del Altiplano.
En realidad, Baños Lara no ha hecho más que reintegrarse a un área de trabajo que ya conocía.
Cuando en noviembre de 2003 se inauguró la Visitaduría Regional de Apan, el ombudsman estatal Alejandro Straffon Ortiz comisionó a Raúl Baños Lara para encabezar la entonces nueva oficina. Ésta es la segunda ocasión que lo destinan a esta zona, que si algo es digno de resaltar de este discreto burócrata de edad madura, y de no menos prestigio profesional, es su reconocido juicio y aptitud contra las violaciones a las garantías individuales.
En cambio, dos asuntos de relevancia mediática son los que López del Castillo dejó irresueltos y que a partir de ahora son responsabilidad del visitador Raúl Baños.
Uno tiene que ver con la reyerta que protagonizó el cuerpo de policía de Almoloya durante un operativo nocturno en diciembre 2006. Al aprehender a un grupo de jóvenes que ingerían alcohol en la vía pública, los policías hicieron uso excesivo de la fuerza, provocando en los adolescentes una serie de heridas en sus cuerpos.
El otro caso es tiene que ver con un policía de Tepeapulco que presuntamente disparó su arma de cargo al suelo para amagar a un ciudadano. De acuerdo con el informe de la CDHEH, el uniformado salió de sus casillas mientras discutía con una persona y desenfundó su pistola, abriendo fuego.
Lo cierto es que López del Castillo Aguirre no alcanzó las expectativas a las que fue designado.
Inclusive, el pasado 16 de febrero, López del Castillo Aguirre estuvo a punto de pisar la calle, de no haber sido por las altas recomendaciones que lo respaldan.
Ese día, se registró un movimiento inusual en la sede estatal de la CDHEH, en la que personal administrativo fue comisionado para localizar a López del Castillo Aguirre y hacerlo presentarse en el despacho de Alejandro Straffon Ortiz.
Una vez que López del Castillo Aguirre arribó a las oficinas centrales, con el rostro desencajado, mostraba un marcado nerviosismo, según refirieron las fuentes. Sin conocer mayores detalles del encuentro, inmediatamente la noticia circuló en los principales círculos gubernamentales, donde se dijo que el presidente de la CDHEH censuró a López del Castillo, hijo del Oficial Mayor del Congreso del Estado, por su torpeza al frente de la Visitaduría Regional de Apan.
Se dice que el nombramiento del “junior” dentro de la CDHEH obedece más a intereses personales que la importancia que reviste una institución de índole internacional.
La llegada de Jorge Luis López del Castillo Aguirre a este organismo fue meteórica, en las que se hizo necesario “cortar cabezas” de personal experimentado y de probada capacidad profesional, para lograr colocarlo en el escaparate público y seguir los pasos de su progenitor dentro del sistema político hidalguense.
Una vez puesta en marcha la oficina regional de Apan en el primer trimestre de 2003, la CDHEH nominó a Raúl Baños Lara como mariscal de Almoloya, Apan, Emiliano Zapata, Tepeapulco y Tlanalapa.
Dos años más tarde, Jaime Acosta Castro, en un enroque, lo relevó del cargo.
Bajo las órdenes de Acosta, inexplicablemente “sacrificó” a su compañero y único proyectista que tenía la CDHEH, Jesús García Arredondo, lo que abrió el camino para que esa plaza fuera asumida por el novel muchacho de 25 años de edad. López del Castillo Aguirre tomó las riendas de la oficina regional de la CDHEH en el segundo semestre de 2006.
En repetidas ocasiones, representantes de los medios de comunicación buscaron abordar a López del Castillo Aguirre, pero eso fue posible por una marcada inasistencia a su oficina, pues parecía que el funcionario cumple más con un papel protagónico y figurativo que de responsabilidad pública, conseguido por las prominentes recomendaciones y méritos de su padre.
Desde su unción, fueron contadas las veces que puso pie en la oficina de Apan.
López del Castillo Aguirre siempre fue identificado con el galanteo y la vida social, al lado de su “leal” asistente, Sandra de Elías Vilchis, otro afamado personaje de la CDHEH con pocas referencias laborales.